PÍDELE A LA VIDA UN CÓMPLICE.
Alguien que aparezca de la nada y no se asuste de tus heridas, de tus sombras, de tus cicatrices...
Quien te vea destruida/o y se arremangue para sacarte de un mal día con su sóla presencia sin que las horas estén contadas.
Con quien puedas sentarte a conversar por horas, al que le puedas contar parte de tu vida, de tu historia, con quien puedas reir horas y perderte en el tiempo, con el que mientras muestres tu sensibilidad y lleves vestida el alma con desilusiones.... te abrace y te diga que todo estará bien. Que sea quien no tome tu vulnerabilidad para dañarte.
Pídele a la vida un cómplice.
Que pueda mirarte, no tan solo verte así hasta con la cara lavada, con las manos sin arreglar ó liviana de lujos.
Que puedas salir a sonreir cualquier día de su mano y también de su vista, pero que te busque con esa preocupación que sólo sienten los que tienen miedo de perderte por que eres parte de sus planes y su felicidad.
Un cómplice que cuando no haya ganas de hacer nada aún así puedas sentir su amor en una caricia, un detalle, una palabra, un abrazo.
Que sepa distinguir esos instantes de soledad que se necesitan cuando los recuerdos y las fechas no le tienen piedad al calendario .
Pídele a la vida un cómplice.
Con quien seas libre, con quien puedas disfrutar plenamente de compartir quien eres y demostrarle tus hermosos sentimientos.
Que llegue la noche y te bese la frente, el rostro, la boca, te saque los miedos, disfrute de tu presencia y te mantenga cada día disfrutando de su presente, pero juntos.
Alguien capaz de entender como eres... por que no ha sido fácil cada mañana cuando despertaste y te preguntaste una y otra vez, hasta donde puede llegar el dolor y las ausencias. Que te tome la mano y te haga sentir segura hasta de ti misma, de cuan importante eres para el ó ella.
Un cómplice para reír y llorar.
Saber que puedes apoyarte cuando tus piernas tiemblan y necesitas un abrazo más que cien palabras. Poder sonreir libremente y ver en sus miradas que aúnque el tiempo este nublado, siempre mantendrán el arcoiris en forma de sonrisas en sus rostros.
Con quien te despidas al cerrar los ojos y te sientas completamente segura de que al abrirlos, estará a tu lado, tomando tu mano para empezar cada día sabiendo que contigo nada será fácil, pero te acepta, te quiere y te elige día tras día.
No lo busques.
No lo sueñes.
No lo imagines.
Ni lo idealices.
Pídele a la vida un cómplice.
El universo siempre conspira a tu favor.
Y mientras llega, sé feliz, busca en ti, disfrútate a ti, vive en ti.
Sonríe, se lo más feliz, que la vida es tan sólo un pequeño Instante!!!
Web.
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