𝙔𝙖 𝙣𝙤 𝙫𝙪𝙚𝙡𝙫𝙤 a los lugares donde mi corazón de fuego se convierte en cenizas y humo. Ya no vuelvo a los antiguos pensamientos que lo único que hacen es aturdirme y hacerme creer que "no puedo". Ya no vuelvo a las relaciones en las que no quedan raíces, ni tierra fértil. Ya no vuelvo a mi propio desamor, a intentar salvar a los otros antes que rescatarme de donde sea que no soy feliz. Ya no vuelvo a escapar de todo lo que necesito aprender. Ya no vuelvo a hablar cuando no lo siento, a sonreír cuando no quiero, a decir sí cuando todas mis entrañas dicen no. Ya no vuelvo a hacer algo solo para que el otro no se enoje, ya no vuelvo a dar mi energía a cosas, personas y situaciones que son puertas cerradas desde hace mucho tiempo. Ya no vuelvo, no, ya no vuelvo, porque en este viaje de regreso a mí misma, lo que no es real desaparece y lo que es verdadero, hoy ilumina mis ojos, mi corazón y el sendero que elijo para caminar. Me voy en silencio, como lo hace la luna y el sol. Señoras y señores, YA NO VUELVO.
Y vos...¿VOLVÉS?
𝑵𝒂𝒕𝒚 𝑳𝒆𝒘𝒊𝒕𝒂𝒏
𝑬𝒔𝒄𝒓𝒊𝒕𝒖𝒓𝒂 Á𝒍𝒎𝒊𝒄𝒂 / 𝑪𝒐𝒖𝒏𝒔𝒆𝒍𝒊𝒏𝒈
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